El pepino es una de las hortalizas más producidas en el mundo, tiene un bajo contenido en calorías e hidratos de carbono, una cantidad elevada de agua y un grupo de nutrientes que hacen muy recomendable su consumo
El pepino, el fruto de una planta trepadora de la familia botánica de las cucurbitáceas, a la que también pertenecen las calabazas, los calabacines, el melón y la sandía, tiene una gran número de beneficios.
Asociado habitualmente con la pérdida de peso, también es conocido por su alto contenido en agua, siendo una gran fuente de hidratación.
Este alimento originario de las regiones tropicales del sur de Asia, una de las hortalizas que más se producen a nivel mundial, ofrece además otros valores saludables.
Las características saludables de este fruto lo convierten en un alimento que tiene mucho que aportar en toda dieta equilibrada, según los expertos en tratamientos y productos para el bienestar.
Según explican las asesoras en nutrición de la plataforma en línea Nutritienda, el pepino es una verdura con beneficios que contiene una cantidad ínfima de grasas (lípidos).
Beneficios
También posee un contenido calórico muy bajo. Aporta solo 13 kilocalorías cada 100 gramos de alimento, por lo que se la suele incluir en los regímenes para reducir o controlar el peso corporal.
Noelia Suárez, directora de comunicación de esta plataforma, describe a EFE los beneficios para la salud de «esta deliciosa verdura, que sirve para mucho más de lo pensamos».
Es rico en vitaminas
El pepino contiene abundante vitamina C, que actúa como antioxidante en la piel y contribuye al buen funcionamiento de los cartílagos y los huesos, según Suárez.
Señala que también aporta, en menor cantidad, vitamina A (retinol). Esta contribuye a formar el colágeno, una proteína que ayuda a mantener la piel hidratada y protegida de los agentes externos, favoreciendo también el mantenimiento de la visión.
Esta hortaliza contiene pequeñas cantidades de folatos, una vitamina B que ayuda a producir el material genético del organismo e interviene en la producción de los glóbulos rojos, señala la experta.
Asimismo, el pepino posee otros beneficios como la tiamina y niacina, dos vitaminas del grupo B. Estas ayudan a las células del organismo a convertir los carbohidratos de la comida en energía para el cuerpo, añade.
Es una fuente de minerales
El mineral más abundante en el pepino es el potasio, que regula la presión arterial.
Contiene menores cantidades de fósforo, magnesio y hierro, los cuales cumplen múltiples funciones en el organismo, como ayudar a que los músculos, los nervios, el metabolismo y el sistema inmunitario funcionen normalmente, y a que los huesos y dientes se mantengan en buen estado.
Mejora la hidratación
Cerca del 96 por ciento del pepino es agua. Por ello, resulta un alimento muy útil para quienes tengan dificultades para tomar el mínimo diario de líquido recomendado o tengan la piel seca o deshidratada.
Aporta fibra vegetal
El pepino, combinado con otras verduras, tiene beneficios que aumentan el aporte de fibra al sistema digestivo. Esto facilita las digestiones y aumenta la sensación de saciedad, reduciendo el apetito y mejorando el tránsito intestinal.
Además, es diurético y favorece la actividad de los riñones.
Tiene propiedades antioxidantes
Los compuestos antioxidantes del pepino reducen los daños provocados por los radicales libres, unas moléculas implicadas en el envejecimiento y el deterioro celular, de acuerdo a Noelia Suárez.
Claves para incorporar el pepino a la dieta
Una de las maneras más sencillas de aprovechar las propiedades saludables y favorecedoras del control del peso del pepino, consiste en incluirlo como ingrediente habitual.
Por ejemplo, en sopas frías de verduras y/o frutas crudas (‘gazpacho’, en la gastronomía española) que pueden incluir fresas, aguacates, mangos o remolacha, o incluso pueden ser solo de pepino con albahaca.
El pepino se puede incorporar a todo tipo de ensaladas. Además, puede tomarse asado, levemente a la plancha o añadirse rayado sobre una masa de hojaldre junto con queso de cabra y cocinarse en el horno como si se tratase de una pizza.
Pepino salsas
Otra manera sencilla para aprovechar la hidratación y el efecto saciante de esta hortaliza consiste en preparar zumo de pepino con una licuadora. El pepino se complementa bien con la manzana verde, el jengibre y el apio en los batidos.
Esta verdura también aporta un toque refrescante y delicioso a una variedad de salsas. Ejemplo de ello es el aderezo griego ‘Tzatziki’, a base de pepino y yogur, también presente en la gastronomía turca.
Claves para una conservación saludable
Para mantener la calidad (color, textura y nutrientes) y las propiedades beneficiosas de esta hortaliza, y evitar que le crezcan microorganismos, es importante almacenarla de modo correcto para alargar su vida útil y garantizar que su consumo sea seguro, explican a EFE Andrea Báguena e Irene Lezcano, nutricionistas de Nutritienda.
«Si no se va a consumir esta hortaliza en el momento de su compra se la puede almacenar en la nevera hasta una semana, teniendo la precaución de no colocarla en la parte más fría del frigorífico»recomiendan estas expertas.
Explican que tampoco es conveniente colocar el pepino al lado de manzanas, plátanos o tomates, ya que estas frutas y verduras producen etileno, un compuesto al cual es sensible esta hortaliza cucurbitácea y que puede hacer que madure más rápido, produciendo una maduración excesiva.
Andrea Báguena e Irene Lezcano recomiendan «lavar el pepino bajo el agua del grifo, sin dejarlo en remojo, solo cuando se va a consumir, no antes, ya que si se guarda con exceso de humedad en la nevera, aumenta la probabilidad de que se deteriore antes».