Chris Tomlinson cuenta su historia de cómo sobrevivió a un accidente que le dejó quemaduras en el 98 por ciento de su cuerpo.
A los 2 años, Chris se encontraba jugando en el patio cuando accidentalmente le cayó una lata de gasolina, y luego de que se encendió el calentador de agua, su cuerpo se incendió.
Chris fue llevado de emergencia al hospital, y los médicos le dieron 1 % de probabilidades de sobrevivir.
Fue donde su familia se refugió en la fe para que Chris sobreviviera y Dios hizo el milagro.
El hombre tuvo que pasar por 200 procedimientos quirúrgicos, sin embargo, siempre puso su fe en el Salmo 56:3 que dice “Pero yo, cuando tengo miedo, en ti confío».
Este no es el único milagro que Chris ha recibido de Dios. Los médicos le decían que no podría tener hijos, pero el Señor lo bendijo con dos hijas.
Pese a las bendiciones, la vida de Chris no ha sido fácil. Luego de 14 años de matrimonio, su mujer lo abandonó con sus hijas.
Chris transformó el duelo a la pérdida de su mujer en una vida dedicada a sus hijas.
«Miré a mis hijas y me sonreían y me abrazaban», recordó. «Y pensé, ‘Este es mi propósito. Eso es lo que tengo que hacer, me necesitan».
Posteriormente, Chris regresó a Florida y consiguió una iglesia que le brindó ayuda y una oportunidad de inspirar con su testimonio.
«Es una gran pasión mía compartir mi historia. Nuevamente, no para mí, sino para darle gloria a Dios», explicó. «Porque mucha gente cree que Dios ya no obra, que Dios no hace milagros. Dios todavía obra milagros cada segundo de cada día. Todo lo que tienes que hacer es mirar a tu alrededor», dijo Chris.