Una vez más, la opinión de Trump acerca de la fe ha acaparado la atención de todos los medios de comunicación.
Durante el discurso del Estado de la Unión (State of Union),el presidente de EE.UU, declaró que la fe y la oración siempre son un aspecto importante en la cultura de su país.
Además, aseguro que durante su mandato, se ha encargado de que se defienda la libertad religiosa en todo lugar.
«Mi administración también defiende la libertad religiosa, y eso incluye el derecho constitucional a rezar en las escuelas públicas», dijo Trump aplaudiendo.
“En Estados Unidos, no castigamos la oración. No derribamos cruces. No prohibimos los símbolos de la fe. No boqueamos a predicadores y pastores. En Estados Unidos, celebramos la fe, apreciamos la religión, alzamos nuestras voces en oración y alzamos la vista hacia la Gloria de Dios”, agregó.
Y aunque estas palabras no se dieron de manera extendida, logró causar impacto en las personas que pudieron asistir a este evento.
Actualmente en la sociedad, los valores cristianos se ven fuertemente criticados cuando el contexto no se alinea a una vida secular, por lo que muchas veces lo llaman “discurso de odio”.
En este país y en el resto del mundo, se ve muy a menudo como las creencias cristianas sobre la fe y la oración son fuertemente atacadas por sus opositores, al igual que el matrimonio heterosexual; actualmente, se está evaluando la expresión de la fe en lugares públicos.
Donald Trump, a pesar de la oposición que ha tenido, ha decidido apoyar públicamente a quienes no tienen temor de expresar su fe en Cristo abiertamente.
A continuación, sus palabras: