La alergia causada por el calor, también conocida como urticaria del calor, es una reacción negativa que sufre la piel ante los cambios bruscos de temperatura corporal y climática. Suele producirse por la exposición prolongada al sol y otras fuentes de calor, aunque también es común al realizar algunos ejercicios físicos de alto impacto.
Se caracteriza por la aparición de sarpullido, erupciones y enrojecimiento, casi siempre acompañados con una incómoda sensación de picor o ardor. Este suele ser notorio en las mejillas, el cuello, debajo de los senos y en otras áreas sensibles de la piel.
Además, en algunos casos, puede venir acompañada con fiebre, hinchazón, pus que sale de las erupciones y otros síntomas que alertan una complicación. De ser así, se debe buscar atención médica inmediata para controlarlo.
Si es un caso leve, muchas veces desaparece una vez que la piel está fría. Además, puede mejorar notoriamente con algunas preparaciones de origen natural. ¿Quieres conocerlas? A continuación compartimos 7 opciones para que no dudes en utilizarlas ante las primeras señales de alergia.
¿Cómo combatir la alergia por el calor?
Los síntomas de la alergia por el calor son incómodos, pero pueden desaparecer por sí solos al cabo de 24 horas. Cuando persisten, pueden estar alertando otro problema subyacente; por lo tanto, en estos casos es fundamental solicitar atención con un médico o dermatólogo.
Hay algunas medidas que pueden ser útiles para combatir los síntomas de la alergia por el calor. Coincidiendo con una publicación en National Health Service (England), esto incluye:
- Usar ropa suelta de algodón.
- Usar ropa de cama ligera.
- Tomar baños fríos.
- Beber mucho líquido para evitar la deshidratación.
- Aplicar una compresa fría.
- No tocar o rascar las erupciones.
De ser necesario, el médico o farmacéutico puede sugerir un tratamiento farmacológico que puede incluir:
- Loción de calamina
- Tabletas antihistamínicas
- Crema de hidrocortisona, aunque no para niños menores de 10 años o mujeres embarazadas.
Soluciones naturales para aliviar la alergia por el calor
Cuando se trata de aliviar la alergia por el calor, también se pueden probar algunos remedios de origen natural que pueden servir para calmar los síntomas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que son soluciones provenientes de la cultura popular y, a menudo, carecen de evidencias que respalden su eficacia.
Pese a esto, la mayoría son seguras de utilizar y no suponen riesgos de efectos secundarios. Por eso, si deseas, puedes probarlas en casa para tratar de calmar los síntomas. Eso sí, utiliza una a la vez, ya que la mezcla de varias al tiempo puede resultar contraproducente. ¿Lista para probarlas? ¡Apunta!
1. Levadura en polvo para la alergia por calor
La aplicación de levadura en polvo como remedio contra la alergia por el calor no tiene respaldo científico. Sin embargo, se dice que su aplicación externa puede ayudar a reducir la irritación y el picor.
No hay evidencias sobre los supuestos beneficios de la levadura en polvo contra la alergia por el calor. Sin embargo, datos anecdóticos sugieren que puede ayudar.
¿Cómo utilizarla?
- Humedece un poco de levadura en polvo con agua y frótala sobre la piel irritada.
- Deja que actúe 20 minutos y enjuaga con agua fría.
- Repite su uso hasta aliviar los síntomas.
2. Hielo
La aplicación de hielo sobre la piel es uno de los remedios más conocidos para aliviar las irritaciones causadas por la alergia por el calor. De hecho, en una publicación de la American Academy of Dermatology, se aconseja como un método temporal para calmar la picazón.
¿Cómo utilizarlo?
- Envuelve unos cuantos cubos de hielo en un paño suave y frótalos durante 5 o 10 minutos sobre las zonas afectadas.
- Repite el tratamiento dos o tres veces al día.
3. Aceite de oliva
El aceite de oliva es un producto que promueve la salud de la piel gracias a su contenido de ácidos grasos monoinsaturados. Una investigación publicada en la revista Plos One sugiere que estas grasas presentes en el aceite de oliva ayudan a prevenir el fotoenvejecimiento facial.
Al respecto, nos encontramos con una revisión publicada en Indian Journal of Dermatology, Venereology and Leprology que destaca que la avena tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que ayudan al tratamiento de enfermedades inflamatorias dermatológicas como prurito, dermatitis atópica, erupciones, entre otras.
¿Cómo utilizarla?
- Incorpora una taza de avena en el agua tibia de la tina, deja que repose cinco minutos y sumerge tu cuerpo.
- De manera opcional, mezcla avena con agua de rosas y aplícala con suaves masajes sobre las zonas más afectadas.
- Repítelo una vez al día, hasta controlar los síntomas.
7. Vinagre de manzana
La falta de evidencias sobre la seguridad y eficacia del vinagre de manzana sobre la piel nos obliga a usarlo con precaución, especialmente sobre las pieles sensibles. De hecho, siempre que se use como producto tópico, debe diluirse en agua.
La razón por la que se aconseja su uso contra la alergia por el calor es que su ácido acético ayuda a reducir la irritación. De hecho, una investigación publicada en Annals of Dermatology determinó que la aplicación de estos ácidos puede ser favorable en caso de dermatitis atópica al mantener el pH de la superficie de la piel.