El Gobierno dominicano tiene tres polos turísticos en mente para desarrollar, mejorar y convertir en destinos de referencia: Pedernales, que se ha convertido en un sueño de antaño para todo la región suroeste; Las Terrenas, en Samaná, un espacio de baja densidad en la recepción de turistas pero que tiene por mejorar cuestiones básicas y elementales como el equipamiento de su hospital y Puerto Plata, que las autoridades identifican como el lugar más castigado por la pandemia del Covid.
En el proyecto Pedernales se trabaja para tener el plan maestro de desarrollo en unos treinta días, explica David Collado, ministro de Turismo.
Eso sí, lo primero en lo que trabaja esta institución es en brindar seguridad a la marca República Dominicana. “El trabajo a corto plazo es que el destino se vea seguro, si internacionalmente no se ve como seguro entonces fracasamos”, dice Collado.
Y a medio plazo entra el proyecto de desarrollo turístico de Pedernales, ubicada a 306 kilómetros al suroeste de la capital dominicana.
Allí se contempla la construcción de un aeropuerto internacional y entre tres a cuatro mil habitaciones, siempre respetando la conservación del Parque Nacional Jaragua.
“Cuatro urbanistas nuestros estuvieron todo el fin de semana viendo los activos y los espacios de la zona, los negocios que hay allá y no salir del respeto al medioambiente, de modo que no sea una construcción invasiva”, explica el ministro. El proyecto contempla ese rango de habitaciones como plan piloto para demostrar factibilidad y porque es lo mínimo que necesita un aeropuerto para ser sostenible y rentable.
“El aeropuerto es indispensable para desarrollar y despegar ese polo turístico”, dice Collado en su participación en el Desayuno del Listín, el encuentro informativo de este diario al que acudió en compañía de Jacqueline Mora, viceministra técnica y en el que también participaron Manuel Corripio, presidente de la Editora Listín; Miguel Franjul, director; Fabio Cabral, subdirector; Juan E. Thomas, editor jefe y Jhenery Ramírez, periodista de la sección económica.
El ministro Turismo reveló que ya han recibido ofertas de marcas hoteleras de Estados Unidos interesadas en operar las habitaciones que el Gobierno allí construya. “Marcas internacionales de mucho prestigio, hoteles de 5 estrellas que ya están interesados en participar en Pedernales”, señala.
En el desarrollo de Las Terrenas, en Samaná, hay varios proyectos en marcha, siendo el principal uno diseñado por la Unidad Ejecutora para la Readecuación de la Barquita y Entornos que dirige el empresario José Miguel González Cuadra. Los empresarios de la zona visitarán el Palacio Nacional en treinta días “para cerrar” el plan de impulso de la zona.
“Terrenas tienen todo, solo hay que darle cariño y empeño”, dice.
Allí se trabaja en modernizar la zona con un plan de ordenamiento territorial y con ideas interesantes como el traslado del cementerio y la regeneración de algunas de sus playas con jornadas de mantenimiento.
También lleva la planta tratamiento de aguas residuales. La recuperación del malecón de Samaná, que se inunda con normalidad ante lluvias y la recuperación de su patrimonio histórico fijándose en 20 casas de inmenso valor en Sánchez.
Pero el tema que probablemente sea más urgente para la población, y como plan de impulso y desarrollo, es el del peaje para llegar a Samaná. El ministro Collado señala que ese es el principal punto que la población de Samaná completa suele plantear.
“Es un tema que viene desde que yo era presidente de la comisión de turismo de la Cámara de Diputados”, explica.
El punto en conflicto es que para una familia llegar y salir hasta la península de Samaná, a unos 177 kilómetros al nordeste de la capital dominicana, requiere pagar cerca de dos mil pesos solo por los peajes de la carretera Juan Pablo II.
“Hay que buscar una salida no atropellante, hay que buscarla porque ahí se está afectando el destino. Buena parte de los asistentes son dominicanos”, señala Collado.
Las nuevas autoridades dieron el primer picazo para la carretera El Limón, por 120 millones de pesos, necesaria para tres proyectos que van a iniciar ahí y necesitaban acceso a la zona.
La próxima semana se dará el primer picazo a la carretera Las Galeras-El Limón, por otros 166 millones pesos.
“Samaná y (Las) Terrenas yo lo veo mucho más a corto plazo porque lo tiene todo”, señala Collado.
Y el tercer polo turístico en el que las autoridades han puesto sus ojos es Puerto Plata. Que de por sí tiene un distintivo especial: fue la lumbrera del turismo nacional en aquellos años ochenta en los que el país comenzó a diversificar su economía pasando del dulce de la caña al candente sol, a la arena y a la playa.
El ministro David Collado identifica un problema con este destino: los vuelos desde Estados Unidos salen más baratos hacia Santiago que a Puerto Plata, que obliga incluso a los puertoplateños a viajar a la ciudad corazón y de ahí, por carretera, a “La Novia del Atlántico”.
El funcionario asegura que Puerto Plata ha sido el destino más castigado por la crisis del coronavirus. Y eso se ha sentido en la perdida de vuelos que ya estaban establecidos con diferentes rutas.
La lucha que libran las autoridades nacionales busca tener (y básicamente mantener) los vuelos a los destinos antes señalados. “Estamos luchando por tener vuelos. Hay que ser agresivos en mantener los vuelos”, explica Collado. Esa agresividad en las negociaciones no necesariamente se traduce en pago de dinero para que las líneas mantengan sus rutas sino, muchas veces, en hacerles llegar la información constante de todo lo que República Dominicana está haciendo para garantizar la salud de los turistas.
Es ahí que explica que hay empresarios que coordinan para tener 4 aviones con líneas aéreas que no están volando, entre los que señala a Edmundo Aja y a Rafael “Papo” Blanco, que han estado viendo la posibilidad de una ruta que toque Miami, Puerto Plata y Cuba.
Collado dijo que Juan José “Pepe” Hidalgo, presidente de Globalia, que maneja Air Europa, les ofreció parquear cinco aviones en Puerto Palta para buscar nuevas rutas a favor del destino.
Todo este plan vendrá acompañado de una promoción intensa con los “influencers” de redes sociales, esto a petición de los hoteleros, que han señalado a este tipo de publicidad como más efectiva para lograr la conversión de turistas internacionales y locales.