Junto con el análisis de sangre, el de orina es uno de los marcadores que más nos ayudan a revelar el estado de nuestra salud. Las sustancias que la componen no sólo nos hablan de posibles problemas en los riñones, también en el resto de organismo, pues por el aparato urinario es el encargado de filtrar la sangre de sustancias nocivas y desechos.
Sin embargo, no hace falta una analítica exhaustiva para que la orina nos ‘avise’ de un posible problema de salud, basta con observar su color para sospechar de que algo no va bien. Y es que el ‘urocromo’, el pigmento que, en condiciones normales es de color ámbar, puede variar ante determinadas enfermedades e incluso comidas o medicamentos.
Uno color, varias posibles causas
Además del ámbar, más claro o más oscuro dependiendo de la concentración, la orina puede adquirir distintas tonalidades, que pueden indicar desde haber comido remolachas o frijoles hasta padecer de porfiria.
Analizamos las 10 tonalidades más comunes y qué puede haber detrás de ellas.
1. Ámbar o amarillo de claro a palo
Este es el color natural de la orina, el que indica que, al menos por el color, no hay nada que temer. El amarillo podrá ser más o menos intenso dependiendo de la proporción de agua y desechos qua haya en la orina.
Si, a pensar de su color normal presenta espumilla, puede deberse a la abundancia de compuestos proteicos o a una dieta demasiado alta en nitrógeno.El extraño caso de un hombre hospitalizado cuya orina se volvió verde
2. Amarillo miel
Si al amarillo es más oscuro significa que la orina está muy concentrada, es decir, que falta agua y podríamos estar deshidratados. Beber agua sería suficiente para resolver el problema.
3. Anaranjado
Un tono anaranjado en la orina puede deberse al consumo de algunos alimentos, como la calabaza o la zanahoria, ricas en carotinoides o algunas suplementaciones vitamínicas ricas en vitaminas del grupo B o C. Algunos medicamentos también pueden alterar el color de la orina y volverá más naranja. Estos son el antiinflamatorio sulfasalazina, la fenazopiridina, algunos laxantes o incluso la quimioterapia. Ante la ausencia de estos alimentos, este tono puede alertarnos sobre problemas en el hígado o la vesícula biliar.
4. Rosado o rojo
Este es uno de los colores más llamativos, pues enseguida lo asociamos con la sangre, y con razón. Y es que la presencia de hematíes en la orina puede esconder varias afecciones del riñón, la vejiga o la próstata, desde piedras, hasta tumores o una infección. Pero no todo es negativo, pues el consumo de frutas rojas como arándanos, moras o remolachas también pueden teñir la orina de este color, al igual que el ejercicio intenso. También puede enrojecer la orina medicamentos como la rifampicina o la fenazopiridina.
5. Marrón / Café
Si la orina recuerda al color de los refrescos de cola o al café puede deberse a una deshidratación muy intensa y a problemas hepáticos o en el riñón. El ejercicio extremo, medicamentos como los antipalúdicos, los antibióticos, algunos laxantes (cáscara sagrada) o alimentos como ruibarbo o aloe también puede provocar que la orina sea de color marrón.
6. Verdoso
Un color verdoso (también azulado) en la orina puede significar que tenemos una rara enfermedad llamada hipercalcemina familiar benigna. También pueden provocar este color algunas infecciones por bacterias o el consumo de consumo de antibióticos y suplementos vitamínicos. También algunos colorantes alimenticios y los espárragos.
7. Azulado
Además de la ya nombrada hipercalcemia familiar benigna, el color azulado en la orina puede deberse al contraste aplicado para hacer algunas pruebas médicas y a medicamentos como como la amitriptilina, la indometacina o la viagra.
8. Turbio
Un color turbio en la orina puede indicar la presencia de una infección, sobre todo si se acompaña de un fuerte olor y de micciones frecuentes. También puede deberse a cálculos renales.
9. Transparente
Si la orina es transparente o casi, esto se debe a que hemos bebido demasiada agua y el cuerpo la expulsa porque no la necesita. A corto plazo no es peligroso, pero si se prolonga en el tiempo puede provocar una pérdida excesiva de sales minerales.
10. Blanquecino
Si orina tiene una tonalidad blanquecina puede significa que estamos expulsando glóbulos blancos, es decir, que nuestro cuerpo está combatiendo una infección. Es probable que se acompañe de fiebre u otros síntomas.
Cuándo consultar al médico
Para que el color sea algo significativo, tenemos que observar estas tonalidades durante unos días. Si persiste y ni lo achacamos a ninguna de las causas benignas que hemos descrito a anteriormente, como alimentos o medicamentos, es recomendable acudir al médico, sobre todo si se trata de tonalidades rosas o si existen otros síntomas, como fiebre o dolores. También si existen antecedentes familiares de patologías renales o si se tienen 50 años o más.
Fuente: 20 minutos